Instalaciones de gas en el hogar. ¿Cuándo y cómo darles mantenimiento?

20 enero, 2023

Tener nuestra casa en un perfecto estado es fundamental para proteger la seguridad de nuestro patrimonio y la de nuestra familia. En la nota de esta semana, te platicaremos un poco sobre las instalaciones de gas; un tema que es muy común y que es fundamental tomar en cuenta para dar un mantenimiento adecuado y conocer las partes que lo conforman. 

El gas LP –con el que cocinamos nuestras recetas favoritas– es una combinación entre butano y propano (la proporción normal es 40% butano y 60% propano) por lo que su distribución debe ser con un manejo específico y tener el mantenimiento adecuado con indicaciones acertadas para evitar accidentes. 

Al momento de ajustar o colocar una instalación de este tipo, debemos tomar en cuenta distintos puntos como los materiales, criterios de instalación y logística de mantenimiento. 

En el caso del Gas LP es responsabilidad del instalador y de quien contrata sus servicios garantizar la seguridad y eficacia del sistema de instalación.

La instalación de gas, de cualquier edificio, bloque de viviendas, vivienda unifamiliar o nave industrial, está formada por el conjunto de elementos que permite la llegada desde la planta suministradora a la entrada del edificio. En esta entrada de blog te compartimos dichos elementos que son requeridos en una instalación:

Acometida. Al igual que en las instalaciones de electricidad y agua, la realiza la empresa suministradora y consiste en la canalización que va desde la tubería general de gas hasta la entrada al cuarto de contadores del edificio.

Cuadro general de contadores. Está situado en la parte superior del edificio y obligatoriamente, muy bien ventilado. Se compone de:

Llave general: Para poder cortar el gas a todas las viviendas.

Contadores de gas: uno para cada vivienda. Dispone de una válvula, que suele estar precintada por la compañía de gas, que regula la presión de suministro.

Canalizaciones individuales: Conducen el gas desde el contador a cada una de las viviendas.

Canalizaciones individuales: Llevan el gas desde la salida del contador hasta una llave de paso individual situada en la vivienda. Normalmente, el acceso a esta llave de paso que corta el gas de la vivienda está situado en la cocina. Si hay galería exterior, está allí. Caso contrario, suele estar situada junto a la ventana, pero siempre en el exterior.

Rejillas de ventilación: Situadas tanto a ras de suelo como en la parte alta de las cocinas, por si se utiliza gas natural o butano. Se pueden complementar con detectores, que avisan de manera luminosa o sonora cuando detectan concentración de gas de un escape.