El corredor que se perdió en el Sahara

15 julio, 2013

En medio de una de las competencias más peligrosas del mundo, un participante tuvo la mala suerte de perder el rumbo y separarse de sus compañeros. ¿Qué crees que hizo para sobrevivir?

 

Mauro Posperi es un italiano que se dedicaba a trabajar como policía y practicaba pentatlón, así que se puso el reto de enrolarse en el Maratón de las Arenas, también conocido simplemente Maratón del Sahara, que se lleva a cabo durante seis días (251 kilómetros, el equivalente a seis maratones regulares) y en el que sus corredores deben portar con ellos todo lo necesario para sobrevivir, como agua y comida. Posperi se inscribió junto a su primo y todo iba bien hasta que una tormenta de arena se atravesó en el camino. En medio de la confusión, nuestro protagonista se desorientó, y cuando por fin hubo posibilidad de ver a su alrededor, se encontró a más de 200 kilómetros de donde debía estar: en Argelia. Pero eso todavía no lo sabía.

En 36 horas, Mauro acabó con sus raciones de alimento y agua. Tuvo que recurrir al no ortodoxo método de almacenar su orina en donde llevaba agua, para evitar una deshidratación severa, y se alimentó con víboras y los murciélagos que atrapó cuando  encontró una capilla abandonada. Ahí se quedó unos días mientras pensaba que ya no habría salvación, hasta que se encontró con un grupo de nómadas que lo ayudaron.

Tres años después, en 1997, Mauro aplicó de nuevo al maratón y esta vez sí lo terminó sin perderse. Es verdad que somos un hueso duro de roer cuando las situaciones son extremas, pero una ayuda no le hace daño a nadie. Además de cargar con un compás para no desviarte del camino, contrata un seguro de Vida y confía en que los tuyos seguirán estando bajo tu cuidado cuando más te necesiten. Contrata al 01800 3627373.

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