Contracturas musculares: qué son, por qué ocurren y cómo aliviarlas
27 mayo, 2025

¿Qué es una contractura muscular?
Una contractura es una contracción involuntaria, persistente y dolorosa de uno o varios músculos. A diferencia de un calambre, que es breve, la contractura se mantiene en el tiempo, y el músculo afectado queda rígido, tenso y sensible al tacto.
¿Por qué se producen?
Las causas pueden ser variadas, pero las más comunes provienen del sobreesfuerzo o mala postura: realizar movimientos repetitivos, cargar peso o mantener una mala postura durante mucho tiempo.
Estrés y tensión emocional: el cuerpo somatiza el estrés acumulado, generando rigidez muscular (especialmente en cuello, hombros y espalda).
Falta de calentamiento o estiramiento: antes o después del ejercicio físico.
Deshidratación o falta de minerales como magnesio y potasio.
Sedentarismo: la falta de movimiento también puede generar contracturas por debilidad o rigidez muscular.
¿Cómo reconocer una contractura?
- Dolor localizado y constante
- Sensación de “nudo” en el músculo
- Dificultad para mover la zona afectada
- Inflamación leve o sensibilidad al presionar
¿Cómo aliviar una contractura?
Aplicar frío durante las primeras horas si hay inflamación, y luego calor local para relajar el músculo.
Masajes suaves o con rodillos de espuma, si no hay dolor agudo.
Estiramientos suaves para devolver la elasticidad al músculo.
Hidratación y buena alimentación, con aporte adecuado de minerales.
Practicar técnicas de relajación, como respiración profunda, yoga o meditación.
En casos necesarios, pueden usarse analgésicos o antiinflamatorios (siempre bajo recomendación médica).
¿Cuándo consultar al especialista?
Si el dolor no mejora en unos días, si es muy intenso o si la contractura impide el movimiento normal, es importante acudir con un médico o fisioterapeuta. A veces, una contractura puede ser el síntoma de un problema mayor, como una lesión muscular o desequilibrio postural.
Un recordatorio importante:
Aunque muchas contracturas pueden tratarse en casa, hay casos en los que se requiere atención médica, fisioterapia o incluso estudios especializados como resonancias o rayos X para descartar lesiones más graves. Contar con un seguro de gastos médicos te da la tranquilidad de poder acudir con un especialista sin preocuparte por los costos, recibir el tratamiento adecuado a tiempo y prevenir complicaciones.
Tu salud es tu activo más valioso. No esperes a que un dolor se convierta en algo más serio: invertir en prevención y estar protegido con un buen seguro médico marca la diferencia. Conoce más de las coberturas del Seguro de Gastos Médicos en nuestra pagina web o llámanos al 800 0627373.